LA PRECARIEDAD LABORAL EN LAS CADENAS DE FAST FOOD
Actualmente los trabajos en cadenas franquiciadas de comida rápida se han convertido en una ruleta rusa para las y los trabajadores. Las condiciones de trabajo dependen del empresario que gestiona el centro de explotación, evitando de esa manera la unión del conjunto de plantillas distribuidas por los numerosos restaurantes que operan bajo la misma cadena, así como la de trabajadoras y trabajadores del sector.
La precariedad laboral está aumentando de manera vertiginosa para que los beneficios del empresario sean cada vez mayores: salarios menores de 4 €/hora, se cobra en negro perdiendo subsidio por desempleo y cotización, “se hace de todo” y con total disponibilidad de horarios, informando sin antelación cambios de turno o jornadas más largas. Se ofertan de manera recurrente puestos de trabajo con días de prueba que luego no se remuneran bajo la excusa de la falta de aptitud para el puesto, e iniciando una nueva tanda de ofertas.
El empresario se aprovecha del paro, de la necesidad y de las pocas opciones laborales fuera del sector servicios y aspira a que la clase obrera aguante con sueldos de miseria.
¡La unión hace la fuerza! ¡Luchemos por unas condiciones de trabajo dignas en el sector de la hostelería!
¡Organízate y lucha en los Comités para la Unidad Obrera!
CONVENIO DE HOSTELERÍA, OTRA OPORTUNIDAD PERDIDA
Un convenio que afecta a casi 50.000 trabajadoras y trabajadores, que es vital para nuestra provincia, se firma sin asambleas, con una única concentración en Benidorm no unitaria.
El 11 de octubre de 2016, el periódico Información decía: Los sindicatos plantarán batalla en el convenio de hostelería para frenar las prácticas abusivas. CCOO y UGT denuncian la tendencia de los hoteles a subcontratar servicios, como el de limpieza o cocina, a empresas de trabajo temporal. Esta práctica permite reducir hasta en un 40% el sueldo
El 23 de marzo del 2017, la Información era la siguiente: Una protesta calienta la negociación del convenio de hostelería. CC OO llama a concentrarse en Benidorm por unas condiciones dignas a 15 días de retomar el diálogo para revisar las condiciones del convenio de hostelería.
El 5 de mayo, la prensa decía: La patronal pone freno a las pretensiones sindicales para el convenio de hostelería. Los empresarios alertan de que el incremento del 8% en 3 años y otras peticiones son «inasumibles» para la mayor parte de empresas.
El 15 de junio, leímos: Patronal y sindicatos pactan una subida salarial del 8% para los próximos 4 años en la hostelería.
Total, para que UGT acabe firmando un Convenio que permite la externalización de los servicios, por lo que las empresas multiservicios seguirán pagando por debajo del convenio.
Lo ocurrido en el convenio de hostelería demuestra la necesidad de los CUO, de unir las luchas y los intereses de la clase obrera. Teníamos una oportunidad de doblar el pulso a la patronal, pero la falta de unidad sindical nos ha vuelto a derrotar.
LIMPIADORAS DE HOTEL, LA SEMIESCLAVITUD EN LOS HOTELES
La hostelería es uno de los sectores donde más precariedad y explotación laboral existe, pero dentro del mismo, las camareras de habitación de hotel tienen una situación que, si cabe, podemos definir como límite.
Fruto de esta, hace ya algunos meses, las camareras de hoteles de Benidorm, conocidas como las Kellys, comenzaron una lucha por la mejora de sus condiciones laborales. Pero ¿cuáles son estas condiciones? ¿Es un caso aislado o se trata de una situación generalizada en este sector?
Lo cierto es que las cien mil limpiadoras de habitaciones de hoteles, que se están organizando en cada ciudad, tienen situaciones similares de explotación. Como ellas mismas denuncian y desde los CUO ejercemos de altavoz, fruto de la reforma laboral sus condiciones han empeorado de manera brutal, lo que les ha hecho organizarse y movilizarse por encima de los sindicatos, en sus centros de trabajo y desde la base.
La limpieza de habitaciones de hoteles ha sido externalizado, limitando derechos sindicales. Una vez hecho esto los empresarios mediante la herramienta del convenio de empresa han puesto las condiciones de estas trabajadoras, que son mayoritariamente mujeres, casi a la altura del Estatuto de los Trabajadores. Los salarios han caído hasta en un 50%, pasando de 1300 a 700 euros, y si quieren ganar más, deben hacer más habitaciones en menos tiempo. Las Kellys realizan más de 20 habitaciones en su jornada laboral, jornada laboral que conocen muchas veces el día anterior, ya que no se respetan los cuadrantes, con altas tasas de stress y de lesiones musculares y óseas, relacionadas con su actividad laboral, pero que no están reconocidas como enfermedad laboral.
Desde los CUO apoyamos la lucha de las Kelly y su apuesta por la organización desde la base y esperamos encontrarnos en la lucha diaria por la consecución de sus reivindicaciones.
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